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Por Ana Cecilia Pérez

La celebración del Día del Niño y de la Niña nos invita a reflexionar sobre la esencia de la infancia y cómo ésta ha evolucionado drásticamente con la irrupción de las plataformas digitales. La era digital, con todas sus maravillas y desafíos, ha redefinido lo que significa ser niño o niña hoy. Si bien la tecnología ofrece oportunidades sin precedentes para el aprendizaje y la conexión, también plantea riesgos y desafíos únicos que dan forma a una experiencia infantil fundamentalmente diferente de la que conocieron generaciones anteriores.

Los niños y niñas de hoy navegan en un mundo donde las tablets y smartphones son casi extensiones de sí mismos. A una edad temprana, se encuentran inmersos en un mar de contenido digital, desde programas educativos hasta juegos interactivos. Esta conectividad constante brinda oportunidades de aprendizaje y desarrollo, permitiendo a los niños adquirir habilidades digitales cruciales para su futuro. Sin embargo, este acceso sin restricciones también abre la puerta a riesgos importantes.

Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.