Respira
Por Bárbara Anderson
Somos junto a Sudáfrica, Brasil y los Emiratos Árabes Unidos, cuatro de las economías más inequitativas del mundo.
No es nuevo. Según el último Reporte Mundial de Desigualdad 2022, el panorama de acumulación de riqueza en un porcentaje muy bajo de la población y el volumen de personas que viven en situación de pobreza no ha cambiado prácticamente nada en 200 años (el informe se remonta hasta 1820).
Si el primer presidente mexicano, Guadalupe Victoria, hubiera presentado un powerpoint de cómo era la distribución del poder económico de los individuos que vivían en el país: con 6 millones de habitantes, el 10% de la población concentraba entre 50% del ingreso, mientras que el 50% del país vivía en pobreza extrema, con apenas del 5 a 15% de los ingresos.
