Respira
Por Claudia Pérez Atamoros
Claudia Sheinbaum, no le apuesto a su fracaso porque México es mi tierra, mi patria; en su suelo descansan mis ancestros, en él habitan mis quereres. Pero, pero sí espero que Usted esté a la altura de la nación.
Usted y yo tenemos en común el nombre y la edad; y de corazón espero que también el sueño de ver a México libre de violencia, de feminicidios y pobreza.
Además, coincidimos en la clase, en la clase media en la que nacimos; en “esa clase, mediera y aspiracioncita”, que tanto se vapuleó y ninguneó en el sexenio que termina. Una clase media que representa el 42.2 por ciento de los hogares y el 39.2 de la población nacional.
“La primera presidenta”, cuánta melodía para sus oídos y qué altísimo honor y compromiso, pero ¿sabe qué?, va a asumir en un momento en que los mexicanos hemos dejado de ser hermanos y nos encontramos inmersos en crispaciones, señalamientos y culpas, y usted, como cabeza de esta gran familia de mexicanos va a tener que gobernar y escuchar no solo el canto de las sirenas sino el lastimoso lamento de miles de víctimas de violencia.
Pasará a la historia, sí, como la primera señora presidente, pero estoy segura de que el cómo debe importarle más.
El próximo primero de octubre asumirá el encargo, justo el Día Internacional de las Personas Adultas Mayores establecido por la Organización de las Naciones Unidas para visibilizar a los viejos. A esos que, como usted y como yo, contamos con 60+.
¿Qué esperar de usted, entonces?
Baste recordar que 33 millones de mexicanos, de los cuales casi tres millones de persona son adultas mayores no están afiliadas a alguna institución de servicios de salud, según datos del INEGI y que la actividad económica de los y las sesentonas representa el 39%. Y otro dato. Octubre mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama.
En la actualidad, la esperanza de vida de la mujer en México es casi de 80 años, eso, claro está, si en el camino no somos víctimas de feminicidio. Nos matan por ser mujeres.
El 52.4 de nosotras padece hipertensión, el 27.3 diabetes…
Usted será la tercera persona, en los últimos cien años, en asumir el encargo de la patria teniendo más de 60 años. Le anteceden Adolfo Ruíz Cortines con su misma edad, 62, y Andrés Manuel López con 65. Usted es una persona estudiada, le recuerdo que 6.4 millones de niños y jóvenes entre 3 y 18 años, no asisten a la escuela.
Será también quien tome posesión en un mes distinto a diciembre desde 1924. Pascual Ortiz Rubio lo hizo un 5 de febrero de 1930, Abelardo L. Rodríguez el 2 de septiembre de 1932 y ahora usted, el uno de octubre de 2024. Por cierto, ¿el 2 de octubre no se olvida?
Su sexenio ¿será un sexenato, un gobierno envejecido, encabezado por una sexagenaria que cree saberlo todo?; o ¿encabezará un periodo sexalente, empático con la sociedad y las voces discordes, resiliente?
Será la vigésima persona que se sienta en la silla presidencial en los últimos cien años, es decir desde que Plutarco Elías Calles asumió la presidencia. ¿A usted también la va a embrujar? o ¿Usted si va a escuchar?
Su toma de posesión está signada por un montón de datos, símbolos y circunstancias. Sinaloa, Chiapas, las madres buscadoras, Ayotzinapa, la justicia, la salud, las fiscalías, los feminicidios, la corrupción… y La Chingada.
126 millones de mexicanos a la expectativa de su actuar.
Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.
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