Por Claudia Pérez Atamoros
Todo comenzó como un chisme.
Puro chismorreo, dijeron.
Ayer dejó de serlo. Chequen el dato.
Alejandra Barrales y Sandra Cuevas buscan chamba senatorial con Movimiento Ciudadano.
Ejercieron gacho su derecho a chapulinear. Y en su brinco de charcos dejaron chiflando en la loma proyectos y convicciones chafas. Ahora ya son chafiretas naranja.
¡Chinguenguenchonas!