Por Claudia Pérez Atamoros
Fenómeno mundial multifactorial, el abstencionismo en México es, particularmente, importante dado que se refleja en los jóvenes. Es la mano que mece la cuna, la otra es la de quienes acuden a las urnas y anulan su voto.
Según datos del INE, en los últimos procesos electorales se ha detectado una baja en la votación de los jóvenes, principalmente entre aquellos que se encuentran entre los 19 y los 29 años.
Recién se dio a conocer, de acuerdo con la encuesta de la agencia de investigación Dinamic, "Jóvenes, al margen de las decisiones políticas" que el 22 % de los jóvenes entre 19 y 35 años no van a salir a votar; así lo expresan sin cortapisas en sus redes. No tienen interés en ningún candidato. “En 22.46 por ciento de sus mensajes no emitieron juicios de valor al respecto, mientras que en 8.27 por ciento de sus interacciones fueron contundentes al asegurar que no saldrán a votar”.
Esta investigación puso de manifiesto la apatía juvenil. Dinamic detectó que quienes tienen entre 18 y 25 años afirman en sus redes que no se presentarán a votar porque “de nada sirve”; en el rango de 26 a 35, el 6.93%, coincide con esa posición, se muestran reacios a votar. Inadmisible y como dicen por ahí, no hay pero que valga.
En México son 22.26 millones de jóvenes de entre 18 y 29 años (los jóvenes de 20 a 24 años son 11.25 millones; los de 25 a 29 años suman 11.01 millones;.) los que tendrán la posibilidad de votar en las elecciones de 2024 para escoger quién ocupará la silla presidencial en el próximo sexenio. Si no lo hacen van a haber desaprovechado su primera, segunda o tercera… oportunidad, de las 10 u 11 únicas e irrepetibles veces en que podrán hacerlo en su vida votar para elecciones presidenciales.
Son datos preocupantes. El futuro es de ellos y su participación no solo es importante sino decisiva. La Estrategia Nacional de Educación Cívica del INE 2024-2026, destaca que el rostro del abstencionismo en México tiene cara de hombre, entre los 20 a 29 años, que vive en comunidades urbanas ubicadas en el noroeste del país, con escolaridad media o media superior.
Al analizar la participación electoral desde 2009, el INE detectó, como una constante, que los varones votan en menor proporción que las féminas y que la población comprendida en la franja de los 19 y 29 años es la que vota por debajo del promedio general en cualquier tipo de elección.
De Sur a Norte, a los jovenazos les vale votar. El INE lo ha diagnosticado y publicado. Los distritos con mayor cantidad de jóvenes hombres abstencionistas se encuentran en los distritos de Mérida, Yucatán (62.8%), Cárdenas y Villahermosa en Tabasco (62.6%), seguido de Ciudad del Carmen, Campeche (58%), mientras que al norte y noroeste del país suman 18 distritos electorales con mayor cantidad de masculinos jóvenes que se abstienen de votar.
No puede ser que la apatía signe el futuro de quienes habrán de sacar al país adelante. Jóvenes, pónganse las pilas. Empaticen con su propio futuro. Su voto vale y decide. La moneda está en el aire y en sus manos está de qué lado ha de caer. No minimicen su fuerza. Son 17 millones de nuevos votantes jóvenes y todos ustedes tienen nombre y apellido. Ejerzan su derecho.
Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.
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