Por Claudia Pérez Atamoros
¡A dormir como dios manda!
¿A poco creyeron que me iba a meter en camisa de once varas y a escribir sobre las mentadas campañas? Ganas no me faltan, aunque… lo cierto es que estas campañas por la presidencia de nuestro México tan herido y aguerrido, como nunca, -ni siquiera con las del 2000- están repletas de sueños, algunos guajiros y otros llenos de esperanza: una al son del “crea fama y échate a dormir” y otra que anda “durmiéndose en sus laureles”. ¡Ah!, y un camarón dormido al que ya se lo llevó la corriente.
Auspiciado por la Sociedad Mundial del Sueño desde 2008, este 15 de marzo -siempre el viernes anterior al equinoccio de primavera- se conmemora el Día Mundial del Sueño que busca concientizar e informar a la población mundial sobre la importancia del descanso nocturno, este año bajo el slogan “equidad del sueño para la salud global”.
Y ¿qué creen?, los mexicanos estamos RE-PRO-BA-DOS.
En 2022 se realizó la segunda encuesta en línea sobre los hábitos del sueño de los mexicanos, patrocinada por Lunna, y esta arrojó que el 65 % de ellos duermen entre 6-7 horas, mientras que el 9% lo hace por 5 o menos horas, lo que sumado nos da un 74% que no duermen las 8 horas recomendadas y, por si fuera poco, la calidad de ellas no es la óptima: más del 50% de los encuestados señalaron tener algún padecimiento del sueño, siendo el insomnio el más común; otros, la gran mayoría (70%) señaló no dormir bien por el estrés y la ansiedad; mientras que un 37% aseguró tener menos calidad de sueño a raíz de la pandemia. Otro dato importante a considerar de dicha encuesta es que las mujeres duermen menos (22%) que los hombres (27%).
Es bien sabido y documentado científicamente que dormir bien es esencial para la salud y que va íntimamente ligado al fortalecimiento del sistema inmunitario e, incluso, a la quema de calorías y al menor consumo de ellas durante el día. El descanso debe ser reparador.
Dormir bien es vital. Padecer insomnio afecta de manera importante la salud física, mental y emocional.