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Por Ele Figueroa
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del libro “Batallas, derrotas, victorias, crónicas y trazos de la conquista del derecho de acceso a la información” que editaron el INAI, InfoCDMX e Integridad Ciudadana. En esta presentación lancé varias preguntas sobre el tema del libro y el contexto actual, preguntas como ¿Porqué es tan importante la transparencia y el acceso a la información?, ¿para qué nos sirve un instituto autónomo?, ¿por qué es relevante que los ciudadanos sepan la información pública?

Lo que reflexioné a partir de estas preguntas lo comparto a continuación.

Lo primero que viene a mi mente es el presidente y su deseo de eliminar a los órganos autónomos, una “razón” para desaparecerlos como manifestó el presidente, Andrés Manuel López Obrador, es que su gobierno es el más transparente de la historia, que ellos tienen como principio “no mentir, no robar, no traicionar”, es decir, que confiemos ciegamente en ellos.

Sin embargo, aquí hay dos puntos que es importante cuestionarle. Primero ¿Si es tan transparente por qué quiere guardar la compra de vacunas anti-COVID o lo relacionado con sus megaproyectos como de “Seguridad Nacional”?, ¿por qué ha habido tantas fallas, técnicas y de “voluntad humana”, para subir información en la plataforma Compranet? En segundo lugar, si desde la Presidencia nos piden que no dudemos de ellos, no sólo el INE y el INAI están en peligro de extinción (aprendan de la CNDH), sino que todas las dependencias gubernamentales como la Fiscalía General de la República y la Dirección General de Comunicación Social (¡ah, caray!, ¿dije la Fiscalía?, jeje, quién sabe por qué la incluí como dependencia del gobierno y no como organismo autónomo, qué descuido) pues durante las “Mañaneras” el Presidente informa sobre las acciones de su gobierno y acusa y condena o absuelve a aquellos que se ven involucrados en algún delito por lo que, al hacer estas funciones, está duplicándolas. Austeridad Republicana, es la segunda razón que da López Obrador.

Pero... ¿Qué es eso de Austeridad Republicana? De acuerdo con el Gobierno de México, en su página web nos dice que Austeridad Republicana “es eliminar gastos excesivos y canalizar recursos para los más necesitados”. Entonces me surgen más dudas aún: ¿Cuáles son los gastos excesivos?, ¿el AMLOfest, las marchas y concentraciones en el Zócalo de la CDMX no son costosos?, ¿el Presidente está muy necesitado?

Dejando afuera el tema financiero y centrándonos en el objetivo de la transparencia, para

ponerlo en dichos, como le gusta al Presidente, la transparencia es como el "pórtate como si Dios te estuviera observando" (Lo que también se hace con la figura de Santa Claus o de los Reyes Magos) serviría como un pre-acusalos con su mamá. Imagina por un momento que toda la información de una obra está al alcance de nuestras manos: que te encuentras con una obra de gobierno en construcción y a un lado hay un enorme cartel con los datos más relevantes como el costo total de la obra, proveedores, materiales, constructora, etcétera, e incluye un QR que te lleva a una página donde te da todo a detalle, además de que hay enlace a las páginas de cada gobierno (cuando participan el local, estatal y federal), así como con la página de cada empresa involucrada, podríamos, cada uno de nosotros, comparar el precio unitario del kilo de cemento (por decir) con el precio comercial, ver qué no está a sobrecosto, que no están involucradas empresas fantasmas, que no hay conflicto de interés, que se está construyendo con los mejores materiales, etc. Una utopía.

Si en verdad sucediera así con cada acción del gobierno, no sería necesario tener un organismo autónomo al que tuviéramos que recurrir cada vez que el gobierno no quiere dar información.

Pero no es así. Y aún sucediendo de esa forma, ¿quién nos garantiza que el Estado está diciéndonos la verdad si no existen órganos autónomos que lo vigilen? Necesitamos un organismo que además de que sea nuestro enlace con el gobierno también sea independiente de él, porque si depende del presidente no podría actuar con la libertad que le da el saber que aunque su trabajo no le gusta al Poder Ejecutivo eso no pone en riesgo su estabilidad laboral, como mínimo.

No somos iguales, dice el presidente. Y con ese argumento quiere que dejemos de preguntar por las decisiones que toma en nuestro nombre. ¿La lógica es que no debemos dudar del gobierno que cuando estuvo en la oposición luchó por poner un peso en la balanza, por hacer más difícil que el Poder Ejecutivo sea un poder absoluto?, al contrario, si ellos mismos ayudaron a crear los mecanismos para hacer los procesos democráticos  más confiables, deben permanecer estos mecanismos y sí, hacer cambios cuando se requiera, pero dejar mancos a los órganos autónomos para que dependan de la "buena fé" del gobierno para su operación no es la solución. ¿Buena fé del Gobierno?, como ejemplos: que la Secretaría de Relaciones Exteriores se encargue de la validación de la Lista nominal de electores residentes en el extranjero, módulos para votar instalados en inmuebles públicos (propiedad del gobierno), la no consideración como propaganda (política-electoral) a las manifestaciones de las y los servidores públicos “en uso de su libertad de expresión” o “en el ejercicio de sus funciones públicas”, entre otras.

Y aquí hay otro tema relevante: ¿qué no quieren que sepamos?, ¿acaso piensa perpetuarse en el poder? De otra forma no tendría la duda de por qué el Gobierno Federal está tan interesado en que desaparezcan los organismos autónomos, o por qué le resulta tan incómodo el INAI a la presidencia.

Me queda claro que la transparencia, el acceso a la información y la rendición de cuentas son  fundamentales para la democracia y el bienestar social. No me parece un costo excesivo mientras sirva para poner un freno y evitar un control total del Gobierno. Porque de no ser así y nos ahorramos el presupuesto destinado a la transparencia, está bien, pero, ¿a qué costo?

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@elefigueroa

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


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