Por Elisa Alanís Zurutuza
Como en el intento fallido de aprehensión de Ovidio Guzmán en 2019, en la captura de 2023 el discurso oficial estuvo plagado de contradicciones:
Que si lo atraparon en flagrancia, pero llevaban seis meses investigándolo.
Que si no estuvo involucrado Estados Unidos, pero la CIA intervino.
Que si participaron los tres niveles de gobierno, pero, para pronto, el mandatario de Sinaloa, Rubén Rocha Moya, y el alcalde de Culiacán, Juan de Dios Gámez, se deslindaron. Recalcaron que se enteraron ese mismo día. Enviaron mensajes contundentes al interior y al exterior de su entidad.