Por Fátima Masse
En México y el mundo las mujeres tendemos a ganar menos que los hombres. Esto no es una mera percepción o un caso aislado, sino que las estadísticas lo respaldan.
En un mundo ideal quisiéramos que un hombre y una mujer con características similares ganaran lo mismo por hacer el mismo trabajo. Sin embargo, medir este concepto es muy difícil porque se necesitaría revisar nóminas detalladas, que incluyan diversas características sociodemográficas y laborales.