Por: Graciela Rock
Después de que publicara un texto en este mismo espacio narrando las violencias que ejerció Jorge Islas López en mi contra durante mi tiempo como funcionaria en el Consulado General de México en Nueva York, salieron a la luz documentos que confirman la existencia de quejas en su contra, así como una carta dirigida a la Dra. Claudia Sheinbaum Pardo, firmada por otras 15 funcionarias, ex funcionarias y ex colaboradoras del Consulado denunciando al señor Islas.Jorge Islas enfocó su “defensa” a través de comunicados en sus redes sociales en los que se limitó a negar las acusaciones. Y hoy, después de que yo hablé sobre la carta y las denuncias en el programa de Azucena Uresti, en Radio Fórmula, Islas declaró en ese mismo espacio que hubo quejas sobre mis funciones por parte de los mexicanos usuarios del Consulado General.Estas quejas existieron, sí, por deficiencias en el servicio, ocasionadas por las decisiones del Cónsul General de exigir al personal consular recibir más personas de las que había capacidad. Esto ocasionó constantes enfrentamientos entre el personal consular y los usuarios. Islas nunca dio la cara, y envió a otros funcionarios a atender las crisis. El audio editado que compartió el señor Islas surge de una de estas crisis y en su momento fue utilizado por manifestantes para exigir la destitución del propio Islas.Entre las contradicciones y mentiras de Jorge Islas sobresale su argumento de que no existen quejas en su contra; sin embargo, aclara que las que existen no encontraron elementos de falta. Es decir, sí hay denuncias, él fue notificado de ellas, sí encontraron elementos en su conducta y él miente sobre ellas.
Prueba de esto son documentos oficiales, algunos de ellos hechos públicos por el portal La Silla Rota, y que deben constar en el expediente personal de Jorge Islas, como el Informe de Conclusiones de la Comisión de Personal, en el cual se señala que, después de las entrevistas realizadas, se determina un incumplimiento del señor Islas al artículo 58 de la Ley del Servicio Exterior, en su numeral XV: [...] actos de violencia, amenazas, injurias, hostigamiento y acoso laboral.Jorge Islas intenta crear un escenario en el que las quejas en su contra surgen de un conflicto personal conmigo, omitiendo dar respuesta a que la denuncia pública es firmada por otras 15 mujeres, algunas de ellas funcionarias en activo, quienes tendrían mucho que perder al alzar la voz. Además, menosprecia las denuncias argumentando que no hacen referencia a incidentes concretos, cuando él fue notificado de todas las quejas, en las cuales se describen eventos y situaciones con claridad de modo, tiempo y forma.No tendría que ser necesario que la totalidad del personal de una institución u oficina sea víctima de acoso o violencia para que se tome con la máxima seriedad, basta con una queja, y quejas hay muchas, solamente en la carta pública hay 16.El señor Islas no solo insiste en que no existen quejas que prueben su violencia sistemática contra las mujeres que laboraban bajo su cargo en el Consulado, sino que por el contrario, cuenta con agradecimientos por escrito de quienes solicitamos cambios de oficina o renunciamos. La revictimización que ejerce el señor Islas incluye omitir que a las prestadoras independientes de servicios se les solicitaba dejar por escrito un agradecimiento, así como en cuestionar por qué no todas denunciamos en su momento, un argumento usado comúnmente por los violentadores y sus defensores para restar valor a los testimonios de las víctimas.Jorge Islas López ejerció violencia, acoso y hostigamiento contra las mujeres en el Consulado antes, durante y después de que yo estuviera ahí. Así lo prueban los oficios OIC/AQ/615-9399 de diciembre de 2019, en el que se hace referencia a dos denuncias distintas contra Jorge Islas, y OIC/AQ/113-328 de febrero de 2020, referente a otra denuncia en su contra.A pesar de que el señor Islas intenta que las denuncias sobre sus violencias se conviertan en un debate personal conmigo, no lo es. Son muchas las mujeres que señalan a Jorge Islas, que han denunciado su violencia y hostigamiento; estas denuncias se encuentran en los expedientes de la Secretaría de Relaciones Exteriores.El señor Islas se llena de orgullo al decir que no existe proceso disciplinario en su contra. Efectivamente, está orgulloso de eso, y esa ausencia de sanción es la razón de nuestro silencio previo, pero también de que hoy estemos sometidas de nuevo a su hostigamiento. El señor Islas pretende atacar mi carácter para defender sus violencias, pero le recuerdo que, incluso si lograse silenciarme a mí, no puede callarnos a todas, ya no.
Comments ()