Por Sonia López Álvarez*
El primero de noviembre la Secretaría de Salud de Durango (SSD) emitió un comunicado de prensa, donde informa de siete casos de meningitis aséptica con el antecedente común de haberse sometido a una cirugía en algunos hospitales privados. Las medidas tomadas ese día fueron la suspensión de las cirugías que involucraran bloqueos anestésicos (que es la famosa epidural).
Desde ese momento inicia las intervenciones de la Comisión para la Protección contra Riesgos Sanitarios del Estado Durango (COPRISED) y la Comisión Federal (COFEPRIS) , ambas Comisiones realizan visitas de verificación sanitaria, por su parte la SSD inicia un protocolo de seguimiento y vigilancia de las pacientes, y la concentración en el Hospital General 450.
A partir de ahí haciendo un recorrido por los comunicados de prensa del Gobierno y la SSD encontramos que se inician con reuniones; para el dos de noviembre ya había 10 casos, se concretan los protocolos de acción y protección con el respaldo del gremio médico del sector público y privado, en algún punto se logra identificar al causante, un hongo, se identifica porque afecta a mujeres jóvenes (las que habían sido sometidas principalmente a cesáreas), y los casos graves y sus familias estaban recibiendo servicios de apoyo por parte del estado.
¿Pero qué es la meningitis aséptica?, es una infección que afecta la envoltura del sistema nerviosos central y la palabra aséptica se refiere a que en los estudios de laboratorio (cultivos o tinciones) no se han encontrado microorganismos (bacterias, virus o parásitos), eso hace que el diagnóstico sea más difícil, los síntomas son fiebre, cefalea (dolor de cabeza) y rigidez de nuca. Es importante recordar que esta enfermedad no es contagiosa entre personas, pero sí puede complicarse y ocasionar la muerte.
Dentro de la investigación se están manejando tres hipótesis: la contaminación de medicamentos, superficies y áreas de hospitales además de agujas o instrumental. Por otro lado, se considera si hubo compras irregulares de medicamentos o de aditamentos, debemos estar atentos y esperar a estos resultados, mientras tanto ya tenemos 18 personas fallecidas, 68 casos de los cuales 14 se encuentran graves y esperemos que la cifra no siga en aumento. Los pacientes ya están recibiendo el tratamiento adecuado para el hongo (Fusarium Solani) sin embargo es un proceso largo y toma tiempo. Aquí lo más importante es evitar que aumenten los casos y que no se sigan presentando muertes.
Se han realizado acciones de todo tipo, clausura de los cuatro hospitales donde ocurrieron los casos, toma de cultivos y análisis de los medicamentos utilizados, alertas sanitarias e inmovilización de los medicamentos que están bajo sospecha, visita de autoridades federales al estado, incluso se solicitó el apoyo a los Centros para el Control y la prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC) para asesoría sobre el manejo médico de los pacientes, se levantó un censo de las pacientes que utilizaron los servicios de esos hospitales y emisión de los síntomas en comunicados de prensa, redes sociales y televisión para que si alguna persona los identifica acuda a recibir atención médica.
Me parece a mí que lo más importante es saber cómo llegó el hongo a las pacientes, de las tres líneas de investigación, necesitamos saber ¿cómo se contaminó? el medicamento o las agujas o las superficies, si no se siguieron los protocolos de higiene, de desinfección, tenemos que saberlo, para que nunca volvamos a ver un brote de estas dimensiones y así de letal. Si los hospitales cometieron irregularidades o no siguieron las Normas oficiales, las Guías de Práctica clínica, es algo de la población y los médicos debemos saber, ¿Para qué? Para corregir esos errores, para evitar futuros brotes en otros lugares del país, en otros hospitales y sobre todo otros pacientes. Todo esto son acciones enfocadas a procurar la Calidad y la Seguridad del paciente que, a simple vista, en algún punto de la cadena de atención parece que fallaron.
Esperemos los resultados de la investigación y esperemos que no haya más muertes.
*Médico especialista en Salud Pública
Directora Ejecutiva de la Sociedad Mexicana de Salud Pública.
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