Document
Por Sonia Serrano Íñiguez
audio-thumbnail
🎧 Audiocolumna
0:00
/2:48

Las desapariciones y feminicidios fueron la marca de la marcha de este 8 de Marzo en Jalisco. Son dos de los delitos que marcan la agenda del estado y que ocuparon los mensajes en pancartas y cartulinas.

Aunque hubo diferentes convocatorias, la principal se concentró en la llamada Antimonumenta, en la plaza Imelda Virgen (la mujer cuyo asesinato motivó que en Jalisco se tipificara el delito de feminicidio). Al marcar ese punto de salida, se daba la espalda al Palacio de Gobierno, donde las demandas de la mujeres no han sido escuchadas.

Según las organizadoras, unas 50 mil personas caminaron de la Antimonumenta a la glorieta de las y los desaparecidos. Las autoridades manejaron 70 mil mujeres protestando en las cuatro convocatorias diferentes.

Previo a la marcha, el martes, el gobierno del estado colocó vallas alrededor de los principales edificios públicos del centro, como el Congreso del Estado, la catedral y la plaza de Armas.

En el Palacio de Gobierno no fue necesario, porque las vallas han sido permanentes a lo largo de la actual administración.

Las mismas protecciones se colocaron alrededor de la glorieta Minerva, uno de los lugares simbólicos de la ciudad y que el 8 de marzo del año pasado amaneció con un pañuelo morado al cuello de la estatua.

Las autoridades tomaron además medidas con un número importante de esculturas en diferentes puntos de la ciudad, a las que primero cubrieron con plástico y posteriormente con una especie de costales antifuego, lo cual fue cuestionado no solo por las señales que se lanzan de calificación de violencia hacia las protestas, sino por la similitud entre las obras y los “encobijados” de la delincuencia organizada.

La violencia contra las mujeres se ha incrementado de manera importante durante el actual gobierno del emecista Enrique Alfaro Ramírez. Tan solo en lo que tiene que ver con feminicidios, el incremento en los primeros cuatro años de su gestión, si se compara con el mismo periodo de su antecesor, el priista Jorge Aristóteles Sandoval, quien fue asesinado en diciembre de 2020, creció 42 por ciento.

Los datos empeoran cuando hablamos de homicidios dolosos, que crecieron casi 70 por ciento en la misma comparación. Esto se suma a los señalamientos de las colectivas feministas sobre la resistencia de la Fiscalía del Estado para tipificar los asesinatos como feminicidios.

La consignas de la marcha contra el acoso y el abuso sexual, los asesinatos y las desapariciones dejan al descubierto una realidad de inseguridad y violencia para las mujeres.

Ayer mismo, el académico de la Universidad de Guadalajara, Carlos Ruiz, especialista en datos, dio a conocer un mapa con los puntos de la Zona Metropolitana de Guadalajara donde se han cometido delitos contra las mujeres de 2018 a 2023, la actual administración. La imagen es impactante, pues no hay un solo espacio de seguridad.

✍🏻
@sonia_ssi

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


Más de 150 opiniones a través de 100 columnistas te esperan por menos de un libro al mes.


El 20% de tu compra servirá para apoyar la labor y funcionamiento de la Red Nacional de Refugios a favor de mujeres víctimas de violencia.

Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.