Por Stephanie Henaro
Lo que falló no fue el Mossad, fue Netanyahu y por eso sus días podrían estar contados.
El Ministro de inteligencia egipcio Abbas Kamel, ha declarado de manera pública que le avisó al israelita en una llamada telefónica, que esto podría ocurrir 10 días antes de que comenzaran los ataques -y se perdieran cerca de 1,900 vidas de ambos bandos-, entre las que se encuentran las de los 40 bebés que fueron degollados por Hamás.
Egipto es un país que generalmente ha servido como mediador en el conflicto árabe-israelí y por eso es importante notar que Abbas Kamel declaró, que estaban preocupados porque Israel estaba centrando su atención en Cisjordania y dejando a un lado la franja de Gaza.