Document

Por Virginia Garay
audio-thumbnail
🎧 Audiocolumna
0:00
/245.376

Somos Madres que ante el DOLOR y TOTURA de no conocer el paradero de un hij@ nos vemos obligadas a realizar la búsqueda incansable para dar con su paradero, lo cual nos ha ocasionado infinidad de eventos traumáticos, pérdidas irreparables no sólo del hij@ que se busca sino de toda nuestra vida. 

Al vernos en la necesidad de enfrentarnos a una autoridad que debe cuidar, proteger y ayudar en la búsqueda y localización de nuestro ser querido, solo encontramos revictimización, estigmatización, señalamiento, humillación, juicios, violación a nuestros derechos pero más grave la violación al derecho de justicia, verdad por la desaparición de nuestro hij@, toda vez que nos señalan diciendo que como madres no supimos guiar, educar a nuestro ser querido, como madres los sobreprotegimos, como madres estamos exagerando y nuestro hij@ regresará después de unas horas ya que se fue por rebeldía, somos humilladas tras un interrogatorio que nos señala como culpables de la desaparición y por tal razón no tenemos derecho en ir a solicitar ayuda. 

Como Madres, ante el flagelo y búsqueda sin descanso hemos sido víctimas de abuso y agresión por parte de las autoridades en todos los niveles de gobierno, los policías que siempre nos dicen tener mucho trabajo y no solo es nuestro ser querido el único desaparecido y por esa razón no han podido investigar, los ministerios públicos quienes de forma grosera y molestos ante nuestra insistencia sobre petición de información, niegan copias de carpeta, niegan información argumentando que sigue la investigación, violando nuestro derecho a la verdad y justicia, somos agredidas por parte de las comisiones de búsqueda al limitar nuestra participación en las búsquedas con argumentos como la falta de recurso o que no es de nuestra carpeta dicha búsqueda, nos agrede la Comisión de Derechos Humanos quien debe defender y hacer valer nuestros derechos puesto que el seguimiento a nuestras quejas o recomendación no es supervisado ni se exige el cumplimiento de estas, actuando como aliado de las autoridades y dejándonos a la deriva. 

Como Madres somos llamadas “Las locas de las palas” tras usarlas todo el tiempo y no parar ante las inclemencias del tiempo puesto que nos interesa más localizar a todos nuestros desaparecidos, somos revictimizadas por los jueces que tras revisar un amparo donde solicitamos la búsqueda de nuestro ser querido, sin revisar a fondo lo declinan con argumentos como: 

a).- Solicitar que el Desaparecido debe acudir a ratificar, 

b).- Al interponerlo de forma virtual exigen sea firmado, cuando existe una normativa de no ser necesaria la firma por el tipo de delito, 

c),- Nos piden mencionar nombres de autoridades y si las mencionas estas se deslindan argumentando que ellos no están a cargo de la carpeta o apenas tomaron la carpeta, esto después de tener cambios constantes de ministerio público, comandantes, policías investigador o cada una de las autoridades a cargo de la búsqueda, investigación y localización de nuestro ser querido. 

No solo hemos sufrido del flagelo, la tortura de no saber donde y como esta nuestro hij@, y las agresiones de las autoridades, sino que también hemos perdido la familia al encontrarnos todo el tiempo en búsqueda en campo, búsqueda en vida, coordinación con autoridades es decir nuestra vida es totalmente lejos de nuestra familia perdiendo nuestro ciclo de vida anterior, ocasionando un desmembramiento más de pareja, hijos, vida social, perdiendo empleo y nuestra vida familiar. 

Pero aún más nos encontramos con la pérdida de salud, puesto que este calvario nos ha llevado a caer en enfermedades como:

1.- Diabetes 

2.- Hipertensión 

3.- Bruxismo (presión de mandíbula ocasionando pérdida de dientes o quebraduras de estos, dolor crónico de mandíbula) 

4.- Quebraduras de alguna parte de nuestro cuerpo por caídas en las búsquedas 

5.- Hernias discales por el esfuerzo en las búsquedas  

Con todo esto podemos agregar que recibimos todo el tiempo intimidaciones de todo tipo para hacernos parar en la búsqueda de nuestros hijos y muchas madres han sido asesinadas al no detener estas búsquedas, haciéndonos dudar sobre el trabajo de búsqueda o perder la vida y no conocer el paradero de nuestro hijo.  

UNA MADRE NO SE CANSA, NO SE INTIMIDA, NO SE DETIENE HASTA ENCONTRAR A SU TESORO DESAPARECIDO

*Virginia Garay es fundadora del colectivo de búsqueda Guerreras Nayarit y miembro honorífico del Consejo Nacional Ciudadano del Sistema Nacional de Búsqueda.

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.