Por Julieta del Río
Ayer fue un día histórico en la defensa de dos derechos humanos fundamentales para las y los mexicanos: la Segunda Sala de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) determinó conceder la suspensión del artículo 33 de la Ley Federal de Transparencia para que los cuatro comisionados que formamos actualmente el Pleno del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI) sesionemos y así votar los 8 mil 236 recursos acumulados a la fecha.
De los cinco ministros que integran la Segunda Sala del Máximo Tribunal, hubo tres votos a favor de la suspensión (Laynez Potisek, Pérez Dayán y Aguilar Morales), uno en contra (Esquivel Mossa) y una abstención (Ortiz Ahlf). Hasta el momento, no se cuenta con el proyecto aprobado, por lo que desconocemos los alcances de la suspensión otorgada; sin embargo, estaremos al pendiente de la notificación de la Corte.
Esto no significa que la situación extraordinaria por la que atraviesa el INAI se acabe. Lo que resolvió ayer el Máximo Tribunal se deriva del recurso de reclamación 229/2023-CA que interpusimos el 9 de mayo ante la primera negativa de la suspensión que solicitamos. Siempre hemos impulsado que nada ni nadie puede estar por encima de la Constitución, y eso incluye normas secundarias; se debe garantizar en todo momento el derecho a saber y a la protección de datos en nuestro país.
De igual forma, aún tenemos pendiente que la SCJN resuelva la Controversia Constitucional (280/2023) que presentamos el 27 marzo y donde solicitamos que el Senado de la República cumpla con su mandato constitucional de designar a los comisionados faltantes del INAI. En un Estado democrático, nuestros derechos no pueden ser rehenes de nadie.
Con la decisión de la segunda Sala de la SCJN el Pleno del INAI podrá volver a sesionar de forma ordinaria, ya que, durante los casi cinco meses de parálisis parcial, sesionamos en nueve ocasiones por mandatos judiciales ante amparos de ciudadanos que, respaldados por la ley, encontraron una vía para que se respetaran sus derechos.
Las y los comisionados del INAI nos preparamos, junto con nuestros equipos de Ponencias, para sesionar el próximo miércoles 30 de agosto, en lo que sin duda será la muestra de una luz en un camino tortuoso que hemos seguido, pero que estoy segura de que la historia demostrará que hicimos lo correcto al no claudicar y defender con convicción a nuestro Instituto, un organismo autónomo que fue creado por luchas sociales y que sirve a la sociedad.
El trabajo de siete comisionados lo seguiremos haciendo entre cuatro, pero eso no nos pesa; nosotros juramos cumplir la Constitución y a ella nos debemos. Aprovechamos también esta situación para impulsar una reingeniería de nuestro Instituto; como órgano colegiado debemos analizar las áreas de oportunidad y hacer todavía más eficiente nuestra labor.
Confiamos en que, cuando se resuelva la Controversia Constitucional que presentamos, la Cámara Alta acate la instrucción del Máximo Tribunal del país. Por lo pronto, el INAI muestra que no se ha detenido ni se detendrá.
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