Por Lillian Briseño
2024 será muy significativo en la historia de México, pues se cumplirán siglos o décadas de eventos fundamentales de nuestro devenir. Desde luego siempre hay motivos para celebrar como nación, pero ahora, especialmente, coinciden en este año diversos sucesos relevantes que será necesario recordar y que esperemos no pasen desapercibidos en la vorágine de noticias que ocurren día a día en nuestro país.
Nada tan importante como la firma de la primera Constitución de los Estados Unidos Mexicanos -el 4 de octubre de 1824-, que definió el nombre del país, su territorio, sistema de gobierno como república representativa, la división de poderes y la religión católica. Ese año también se crearía el Distrito Federal -hoy CDMX- como sede de los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Dos siglos nos separan de aquellos dos eventos fundacionales y definitorios del Estado mexicano.