Marilú Acosta

Salud casa por casa… del bienestar.

El segundo piso de la cuarta transformación no sabe las tablas de multiplicar.

Por Marilú Acosta

Buenas, buenas, jóvenes. Saquen una hoja en blanco y pongan su nombre hasta arriba y la fecha. Espero que traigan su calculadora porque la van a necesitar. Hoy toca examen sorpresa.

Anoten:

De octubre a diciembre.
13.6 millones de adultos mayores (de 65 años en adelante) y personas con discapacidad.
12 millones de viviendas.
80 preguntas del cuestionario de la salud: el cuadernillo del bienestar.
20 mil siervos de la nación.
21,500 contrataciones de personal de salud (médicas y enfermeros).
Periodo de contratación del 21 de octubre y el 15 de noviembre.
Visitas bimestrales a 12 millones de viviendas.

Ahora escriban las preguntas. Tienen 10 minutos para resolverlo y revisamos respuestas:

¿Cuántas casas en total les toca visitar a cada siervo? 600 casas.
Pensando en 1 minuto por pregunta para hacerla, responderla y anotarla, ¿cuántos cuestionarios se pueden llenar al día en 8 horas laborales? 6 cuestionarios.
¿Cuántos cuestionarios pueden aplicar los 20 mil siervos al día? 120,000 cuestionarios.
¿Cuántos días, semanas y meses se necesitan para hacer el censo (aplicar cuestionarios)? 114 días, 16.3 semanas, 4 meses (sin día de descanso)
¿Cuántos días hay entre el 21 de octubre y el 15 de noviembre? 26 días.
¿Cuántas personas deben contratarse por día? 827 personas (sin día de descanso)
¿Cuántas casas se deben visitar al mes, semana, día, para cumplir la visita bimestral? 6 millones de casas al mes, 1.5 millones a la semana, 214,286 al día (sin día de descanso)
¿Cuántas casas pueden visitar al día los 21,500 personal de salud? 10 casas por persona, al día (sin descanso y solitos).

Gracias, pueden guardar la hoja en sus mochilas, este examen no contará en su calificación final.

El segundo piso de la cuarta transformación no sabe las tablas de multiplicar. ¿Por qué el censo lo hace la Secretaría del Bienestar? ¿Acaso se les descompuso el INEGI? O desmantelaron tanto la Secretaría de Salud que ya no puede ni siquiera hacer un diagnóstico comunitario. Porque presentan este programa como la gran innovación de humanismo mexicano, la iniciativa exclusiva del amor al pueblo y con los pobres primero en la mente; pero esto se llama diagnóstico comunitario que debería de estar ya hecho por parte de las jurisdicciones sanitarias. Están inventando el hilo negro, nos quieren convencer que esta agua tibia va a recibir algún Premio Nobel. ¿Será tanto su desconocimiento que se han convencido que, en efecto, están descubriendo la Salud Pública? Lo malo de preferir lealtades a conocimientos, es construir un plan de gobierno sobre sueños guajiros. Quizá el Nobel que pudiera recibir es el de literatura, porque es pura ficción.

Los tiempos no dan, los recursos humanos no dan, los económicos sí, porque al final lo que quieren es mantener el control de la población al venderles la idea que este gobierno sí atiende a la población “históricamente” excluida. Como si la historia excluyera y no la ya demostrada incapacidad de gobernar que tiene la cuatroté, a través de la visión cerrada del partido en el poder. Nos ha costado mucho dinero, tiempo, esfuerzos y sangre, a todo el país, la curva de aprendizaje de este nuevo grupo (inculto y resentido) que busca administrar el negocio de la corrupción gubernamental.

Ese cuadernillo del bienestar que llenarán los siervos de la nación, ¿en qué momento lo van a vaciar a un sistema digital? Porque se prometió que se digitalizaría el gobierno, como nunca antes. ¿Dónde queda la ética profesional? Las preguntas de salud (historia clínica), debe hacerlas personal de salud, no evangelizadores de la palabra del Señor de La Chingada. ¿Cómo van a analizar datos (Big Data) de 13.6 millones de personas con un cuadernillo escrito a mano?

Por más que digan que las farmacias del bienestar ahora sí serán la solución al desabasto, ¿cómo harán el cruce de información entre los cuadernillos, la compra de medicamentos y su distribución?

Lo más inesperado es que, con un reloj Casio vintage, podrían salvar a México. Ya no hablemos del sentido común y de expertos en Salud Pública, porque sería pensar que la Doctora, la científica, la humanista, en verdad valora el conocimiento humano, la dignidad y el bienestar de sus gobernados.