Document
Por Nurit Martínez

Las redes sociales explotaron segundos después de que Camila Fernández, nieta del cantante ícono de México, Vicente Fernández, tropezó al entonar el Himno Nacional en la ceremonia previa a la pelea del boxeador Saúl “Canelo” Álvarez. Con morbo, miles de mexicanos nos acercamos a ver la transmisión, dado que la lista de cantantes que se enfrentan a esa piedra se aumenta día a día.

De nada sirve que todos los lunes en las escuelas públicas o privadas de educación básica se arranque una hora a la labor de enseñar para entonar el Himno Nacional o los himnos estatales si, cuando niños o adultos son invitados a cantarlo, cambian la letra ante lo incomprensible de algunas palabras para nuestro tiempo.

Quizás la joven jalisciense, heredera del apellido Fernández, fue presa de los nervios al estar por primera vez ante miles de compatriotas en el ring de la T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada, en Estados Unidos. El traje de charro para mujeres, con todo requisito para los conocedores de la fiesta nacional, cumplía cada uno de los cánones. Todo parecía perfecto hasta que la emoción la captó.

Camila empuñó el brazo izquierdo, luego levantó el dedo índice, los ánimos se incrementaban en la primera estrofa, hasta que en la segunda estrofa lanzó: “Profanar con su plata tu tierra” en lugar de “Profanar con su planta tu suelo”.

Los videos virales muestran a un Canelo desconcertado con la frase. No es la primera vez en la que, en una de sus peleas, ocurre algo similar. A Ángela Aguilar le sucedió también; cambió el ritmo de la letra y esto provocó un destiempo con la música. Eso fue en mayo de 2022, en la pelea realizada en Dallas.

Quienes cambiaron la letra en otros eventos deportivos fueron Ana Bárbara, Jorge “Coque” Muñiz, María León y Vicente Fernández, abuelo de Camila. Él lo hizo durante la inauguración de los Juegos Panamericanos del 2011, en Guadalajara, Jalisco.

Más allá de las burlas, del escarnio en las redes sociales y de la dureza con la que observa estos hechos la Secretaría de Gobernación, y de que si somos seres humanos y no hay que “tomarlo a pecho” como dijo el Canelo al finalizar la pelea en la que ganó por decisión, la verdad es que ese rigor patriótico no abona a que haya una verdadera cultura sobre los momentos históricos de nuestro país.

Las redes sociales están inundadas de niños y jóvenes que no tienen idea de las mujeres y hombres que contribuyeron a un suceso como la Independencia Nacional. En una primera mirada a las arengas en las escuelas, un niño lanza a todo pulmón “¡Viva su jefa!”, en lugar de “¡Viva Josefa (Ortiz)!”. Otro más se emociona y réplica lo que seguro escuchó en alguna calle: “¡Viva México, cabrones!”, las risas no se hacen esperar. En otro video, otro niño se va de largo en la retahíla y lanza: “¡Viva el América!”.

Ejemplos hay muchos, y las redes multiplican cada año los sucesos de políticos, sean presidentes municipales, gobernadores o embajadores.

En el caso del Himno Nacional, cualquier alteración está regulada por la Ley sobre el Escudo, la Bandera y el Himno Nacionales en su artículo 57. Las sanciones van desde una multa de tres mil a 50 mil pesos hasta un arresto por 36 horas.

Hasta ahora, eso no hace que, en general, haya un conocimiento claro del Himno y menos aún la comprensión de su letra.

En esa misma ceremonia en donde Camila equivocó una palabra, se entonó el himno de los Estados Unidos y, en una interpretación libre, como ha ocurrido en otros eventos o en la cinematografía y otros deportes, los artistas encargados dan su propia interpretación y nadie los sanciona. El orgullo de ser portador de ese momento es lo que viste a cada uno de ellos.

En cambio, en México hay antecedentes de querer endurecer aún más, por parte de Morena, las sanciones a quienes hagan su propia interpretación de este símbolo nacional. En noviembre del año pasado, Ana Elizabeth Ayala pidió hasta 4 años de prisión para quien entone mal el Himno.

En México siempre habrá un "Masiosare, extraño enemigo" si no encontramos quién explique a las nuevas generaciones el sentido de nuestro Himno, considerado en la década de los 70, el segundo más bonito del mundo según una competencia internacional en Europa, tan sólo después de Marsellesa. Por ahora, que siga la celebración de fiestas patrias. ¡Viva México!

audio-thumbnail
🎧 Audiocolumna
0:00
/259.584

Las opiniones expresadas son responsabilidad de sus autoras y son absolutamente independientes a la postura y línea editorial de Opinión 51.


Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.