Por Pamela Sandoval
Este miércoles 14 de diciembre se cumplieron 10 años de uno de los episodios más negros en la historia de los Estados Unidos. La masacre de la Escuela Primaria Sandy Hook donde Adam Lanza, un joven de 20 años mató a 28 personas, 20 de los cuales eran niños de 6 años.
Catalogado como el tiroteo masivo más mortífero en una escuela primaria o secundaria en la historia de Estados Unidos, dejó claro que era inminente una reforma sobre el control de las armas. Armas que en Estados Unidos están tan disponibles como una Coca Cola y sobre las cuales no hay regulación ni restricción.