Por Sandra Romandía
En febrero del año pasado, un grupo de funcionarios del gobierno morenista de Tamaulipas, liderados por Daniel Jasso Sánchez, director administrativo en la Secretaría de Desarrollo Urbano y Medio Ambiente (Seduma) de esa entidad, lanzó un negocio para vender medicamentos al gobierno federal. Grupo Osherx, la nombraron.
Pescaron rápidamente un contrato de 57 millones de pesos para surtir medicamentos que incluía eritropoyetina, una hormona que requiere preservación en cadena de frío. El medicamento se produjo en el Valle de México y había que entregarlo en las bodegas del IMSS en Acapulco, pero Jasso Sánchez dijo que tenía sus bodegas en Ciudad Victoria, las cuales resultaron una casa habitación entre terrenos baldíos.