Por Sandra Romandía
En el mundo político de México, la corrupción ha sido un tema constante que ha trascendido partidos y administraciones. Como ese hedor que queda aún limpiando un cuarto donde fue encontrado un cadáver, o como las plagas que parecen imposibles de eliminar aún con las más extenuantes jornadas de fumigación.
La corrupción en este país sigue enraizada y manifestada en el gobierno en el poder -que prometió acabar con ella- y de eso hay mucha documentación.
Pero recientemente, un reportaje publicado en el portal de investigación Emeequis de la pluma de Áxel Chávez arrojó a luz una conexión entre el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y la autollamada Cuarta Transformación.