Por Sofía Pérez Gasque Muslera
En el mundo empresarial actual, los grupos de mujeres dentro de las organizaciones no solo han cobrado relevancia, sino que han demostrado ser un factor clave en el crecimiento profesional de sus integrantes y en la mejora del desempeño de las empresas. De acuerdo con estudios de Harvard Business Review y Gallup, las empresas que fomentan estos espacios logran un aumento significativo en el compromiso, la productividad y la retención del talento femenino.
Los grupos de mujeres en las empresas, también conocidos como Employee Resource Groups (ERGs) o redes de liderazgo femenino, proporcionan un espacio de mentoría, desarrollo profesional y apoyo. Harvard Business Review ha encontrado que las empresas con programas estructurados de apoyo a mujeres tienen un 22% más de probabilidades de retener a su talento femenino en comparación con aquellas que no los tienen.
Por su parte, Gallup señala que los equipos con mayor diversidad de género son un 21% más rentables y experimentan una mayor innovación. Además, la participación activa de las mujeres en redes de liderazgo dentro de las empresas ha contribuido a mejorar la satisfacción laboral y el acceso a oportunidades de promoción.
Beneficios clave de los grupos de mujeres en las empresas
- Mayor desarrollo profesional: Las participantes de estos grupos tienen más oportunidades de acceso a formación, mentoría y conexiones estratégicas dentro de la empresa.
- Mejor retención del talento: Un estudio de Gallup reveló que las mujeres que se sienten apoyadas en el lugar de trabajo tienen el doble de probabilidades de permanecer en la empresa a largo plazo.
- Crecimiento en liderazgo femenino: Empresas que implementan programas de mentoría entre mujeres han reportado un aumento del 20% en la promoción de mujeres a puestos de liderazgo.
- Mejor ambiente de trabajo: Los grupos de mujeres fortalecen la cultura organizacional, generando espacios más inclusivos y colaborativos.
Para que un grupo de mujeres dentro de una empresa sea exitoso y genere un impacto positivo, es clave una organización estructurada. A continuación, algunos pasos esenciales:
- Definir el propósito y los objetivos: El grupo debe tener una misión clara, ya sea promover el liderazgo femenino, mejorar la equidad salarial, fomentar la mentoría o desarrollar una red de apoyo.
- Obtener apoyo de la empresa: Contar con el respaldo de la alta dirección es fundamental para garantizar recursos y reconocimiento. Otro estudio de Harvard Business Review señala que los ERGs con apoyo ejecutivo logran mayores avances en equidad de género.
Crear un liderazgo interno sólido: Un comité organizador con roles definidos (coordinación, eventos, comunicación) ayudará a mantener la efectividad del grupo.
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