Por Sofía Guadarrama
El viernes pasado se aprobó el dictamen que dará mayoría calificada (364 curules) a Morena y aliados en la Cámara de Diputados. Guadalupe Taddei, Norma Irene de Cruz, UucKib Espadas, Arturo Castillo, Carla Astrid Humprey Jordan, Rita Bell López Vences y Jorge Montaño Ventura, votaron a favor del dictamen, a pesar de que la consejera electoral del INE, Claudia Zavala, propuso una interpretación del artículo 54 de la Constitución para calcular el 8% de sobrerrepresentación permitido y que impedía la creación de mayorías artificiales.
La siguiente batalla será en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF), la máxima autoridad jurisdiccional en materia electoral.
Desafortunadamente, el TEPJF, actualmente está incompleto. Dos de sus ponencias están vacantes desde el 1 de noviembre de 2023, algo sumamente grave para nuestra democracia, ya que los diputados y senadores de MORENA y aliados se han negado a elegir a los nuevos magistrados.
La magistrada presidenta Mónica Aralí Soto Fregoso y los magistrados Felipe de la Mata Pizaña, Janine M. Otálora Malassis, Reyes Rodríguez Mondragón y Felipe Alfredo Fuentes Barrera tendrán la última palabra. En sus manos está el futuro de este país. De ellos dependerá que sistema de gobierno tendremos en los próximos veinte, treinta o cincuenta años. Democracia o dictadura. Libre expresión o represión.