Por Sofía Ramírez, directora de @MexicoComoVamos

La confianza de las y los consumidores es un indicador del optimismo de las personas. Ligada a la perspectiva de las personas respecto a cómo ha ido la economía en el último año y cómo vendrá en el próximo, más que mostrar la trayectoria de las variables macroeconómicas, posiblemente refleja el incremento en sus ingresos laborales y la esperanza de un mejor futuro.

Basta con recordar cómo en julio 2018 el ánimo del consumidor brincó al igual que la victoria de AMLO, que en las urnas ganó con más de 30 millones de votos y en la confianza sumó entre 5 y 10 puntos -en una escala sobre donde 50 es el umbral del optimismo- en los rubros referentes al futuro cercano.

En lo que va del sexenio, incluso considerando la pandemia, el incremento de los ingresos laborales fue de entre 16% y 19% usando datos de la ENOE trimestral del INEGI ya descontando la inflación, incluso entre hombres y mujeres con empleos dentro de la informalidad laboral.

Mujeres al frente del debate, abriendo caminos hacia un diálogo más inclusivo y equitativo. Aquí, la diversidad de pensamiento y la representación equitativa en los distintos sectores, no son meros ideales; son el corazón de nuestra comunidad.