La siguiente columna está dedicada a otro capítulo de corrupción en el estado de Morelos y tiene que ver con la apertura de una nueva notaría, concesionada a Alejandro Gómez Núñez, hijo del notario Gregorio Alejandro Gómez, quien se ha prestado en otros asuntos turbios y en esta denuncia fue el encargado de los trámites legales para crear la notaría entregada a su hijo, ubicada en Jiutepec, y en donde Cuauhtémoc Blanco y su hermano, Ulises Bravo, operaron la acción.
El audio filtrado es una conversación entre Eduardo Kenji Uchida, exdirector jurídico y hoy titular del Instituto de Servicios Registrales y Catastrales de Morelos, y su entonces jefe, Pablo Ojeda, exsecretario de Gobierno de Morelos.
Este audio se puede escuchar completo en el canal de Youtube de Irradia Noticias Morelos y destaca lo siguiente:
Fue Kenji quien presenta a Alejandro Gómez con Ulises Bravo porque éste le pidió un favor para el PES. Kenji dice que le insistió a Ulises Bravo en informar a Pablo Ojeda porque se acaba el año (2021) y Jesús Toledo (presidente de notarios en Morelos) se va en 2022 y tendrían que pedir el favor de que se quede otro año más.
El gobernador Cuauhtémoc Blanco le dio la instrucción de instrumentar la notaría de Jiutepec.
Kenji le dice a Ulises que si no sale la notaría de Jiutepec en 2021 lo tendrán que sacar con otro Colegio, porque Jesús Toledo se va en febrero de 2022.
Ulises debió informar a Pablo Ojeda porque a él se lo encargó el gobernador. Kenji asegura haber estado en esa mesa.
Pablo Ojeda habla de los antecedentes e irregularidades en que ha incurrido Alejandro Gómez (papá). Hizo escrituras estando fuera de México (eso es un delito contra la fe pública).
Ojeda explica los antecedentes de Alejandro Gómez, mencionando que hizo un acuerdo con Carmen Cuevas para hacer la guerra al grupo de Ojeda; dice que mintió para obtener una licencia para no perder su notaría para irse a trabajar a Cuautla (esto fue para ocultar un problema grave de salud que motivaría la terminación de su cargo como notario por no estar ya en pleno uso de sus facultades); también menciona que les ofreció dinero para que su hijo se quedara con su notaría; expresamente, Ojeda dice que Alejandro Gómez ya lo había tratado de sobornar.
Ojeda dice que él ayudó a construir el Colegio de Notarios que preside Jesús Toledo y evitó así que fuera designado en su lugar Manuel Carmona (se supone que el Colegio es autónomo, lo cual revela que Jesús Toledo está entregado al gobierno y es operador del gobierno en los temas del notariado).
Ojeda dice que Jesús Toledo no le dijo nada sobre la creación de la notaría de Jiutepec.
Ojeda insiste en que Jesús Toledo no es presidente por casualidad. Esto corrobora que está entregado al gobierno y que no es autónomo.
Ojeda da a entender que Jaime Castera fue cuota del gobierno para ser designado como magistrado del TSJ. Esto pondría en entredicho la autonomía del magistrado y la intervención del Poder Ejecutivo en algo que compete al Congreso, que es la designación de los magistrados.
Ojeda le pide la renuncia a Kenji y está consciente de que su amigo (Ulises) lo va a apoyar y que este tema puede motivar su salida de la Secretaría de Gobierno, por lo que podría estar muy orgulloso de que lo corran.
Pablo Ojeda menciona que él construyó al Colegio de Notarios, que ellos armaron su estructura, que la negociaron, planearon, concertaron.
Kenji dice que lo que le ofreció a Jesús Toledo (a cambio de ayudar en la notaría de Jiutepec) fue darle una notaría a Puig (hijo del magistrado electoral). También dice Kenji que Jesús Toledo estaba de acuerdo en que se creara una notaría nueva para Alejandro Gómez porque si el papá renunciaba y se bajaba de su notaría para dársela a su hijo los demás notarios intentarían arrebatarsela porque todos la quieren y entonces no se respetaría un eventual acuerdo. Con esto se confirma el conocimiento y participación de Jesús Toledo, quien estuvo de acuerdo con todo el plan. Ojeda aquí dice que la oferta fue de 30 millones de pesos.
Jesús Toledo le dijo a Kenji que el que se molestaría (con la nueva notaría de Jiutepec) sería Eduardo Menéndez (notario 7) porque éste quiere que su hijo sea notario, lo cual es grave, significa que no llegan los mejores, sino los familiares, siendo que los privilegios de sangre están prohibidos en una democracia.
Kenji le dice a Ojeda que buscará a Ulises para ubicar otro espacio. Se supone que Ulises no tiene ninguna autoridad (más que el vínculo de sangre con el gobernador).
Por lo pronto, la noticia corrió como pólvora y estalló en Casa Morelos. Habrá que ver qué hacen con tanta información quienes pueden y deben exigir transparencia y rendición de cuentas al gobierno de un futbolista que extraña las canchas, mas no los reflectores, porque esos los encuentra en eventos sociales…
@yohaliresendiz
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